Entradas

Mostrando entradas de septiembre 5, 2009

LAS NARICES DE UN EQUIPO

Andábamos a principios de los noventa del pasado siglo y un equipo de baloncesto encantado de conocerse viajaba hacia Munich. Era el primer año de Euroliga con formato Final Four. Poco antes de aterrizar, el aparato comenzó a moverse mucho más de lo previsto. La mirada de uno de los protagonistas trató de pulsar el ambiente del grupo: los aleros, más preocupados por los puntos del día siguiente, no estaban para tragedias aéreas. En los pívots, sin embargo, había algún padre de familia encogiéndose con cada turbulencia. Y qué decir de un joven reserva con las manos de su brillante futuro agarradas al asiento de aquel macabro parque de atracciones aéreo. Aquella mirada general la cortó de repente el impagable sexto hombre, con un proyecto muy apetecible: “oye, antes de que esto se caiga, ¿por qué no le apretamos una mano de leches a ese ‘hijoputa’?” Ni el avión se cayó, ni el entrenador recibió jamás su merecido. Sin embargo el equipo acabó jugando la Final Four, fundamentalmente por la